Ecos del Clásico | Beck: Odelay (1996)

Una revisión a la obra maestra del inclasificable genio californiano

[Ricardo Portman] @ecosdelvinilo | @ricardoportman_

Si Mellow Gold mostró solo la punta del iceberg, su continuidad, titulada Odelay, era el témpano visto en 360 grados, levitando sobre el océano de influencias de un Beck Hansen en estado gracia. El autor de Loser debía demostrar que era mucho más que un one-hit-weirdo-wonder; para ello empezó las grabaciones de Odelay en 1994, teniendo como punto de partida varias tragedias personales (entre ellas la muerte de su abuelo). Con un espíritu entristecido y casi monocorde, Hansen plasmó unos primeros cortes orientados a lo acústico y austero, de los cuales solo incluyó Ramshackle, en la lista definitiva del álbum (este estilo sombrío regresaría en su álbum Mutations de 1998). El mundo interno de Beck, variopinto y ecléctico, se plasmó a la perfección en cada pista, ganando enteros cuando decidió prescindir en la producción de Tom Rothrock, Rob Schnapf y optó por trabajar con The Dust Brothers. Este cambio fundamental orientó el sonido de Odelay hacia derroteros más alegres, colindantes con el hip-hop. Cada tema, deliberada (y fallidamente) anticomercial, fue elaborado con todo lo que se le venía a la cabeza a su autor: Samples, sonido Lo-Fi/lounge y guitarras vintage.

Se enlataron 30 temas para terminar utilizando 13. Los once primeros cortes e incluyeron en el producto final, quedando dos como bonus tracks (ases bajo la manga en realidad). Originalmente el disco se iba a llamar Órale, por los amigos mexicanos de Hansen, pero por un error durante la impresión de la tapa terminó titulándose Odelay. Según otras fuentes el título significaba Oh Delay (Ah la tardanza) por lo largo del proceso de grabación. La excéntrica portada del álbum incluía la fotografía de un perro de raza Komondor saltando sobre un obstáculo y se eligió a última hora a toda prisa, sin estar muy decidido Beck sobre cual portada utilizar. La tipografía fue seleccionada por un empleado del sello discográfico.

Lanzado finalmente el 18 de junio de 1996, Odelay alcanzó el puesto 16 en el Billboard, vendiendo más de 2 millones de copias sólo en los Estados Unidos. A pesar del enfoque ‘todo vale’ del disco, terminaron por extraerse tres singles promocionales de éxito: Where It’s At, Devil’s Haircut y The New Pollution. Lo variado de los registros abordados convirtió al álbum en un favorito casi instantáneo, valiéndole la nominación a ‘Disco del Año’ en los Grammys y dos gramófonos en las categorías de ‘Mejor Álbum de Música Alternativa’ y ‘Mejor interpretación vocal rock masculina’ por Where It’s At. Dentro del apartado de discos clásicos Odelay ha aportado ese condimento discordante, irónico y genial que le ha ubicado en todas las listas creadas sobre los mejores discos de la historia. Una obra maestra.

Odelay

Lanzamiento: Junio de 1996. Sello: DGC/Bong Load Custom Records. Productores: Beck Hansen, The Dust Brothers, Mario Caldato Jr., Tom Rothrock, Rob Schnapf, Brian Paulson.

Tracklist: Devils Haircut, Hotwax, Lord Only Knows (Beck Hansen), The New Pollution, Derelict, Novacane, Jack-Ass, Where It’s At, Minus (Beck Hansen), Sissyneck, Readymade, High 5 (Rock the Catskills), Ramshackle (Beck Hansen).

Todas las canciones compuestas por Beck Hansen, John King y Michael Simpson (excepto donde se indique lo contrario).

Personal: Beck Hansen: Voz, guitarras, bajo, teclados analógicos, piano, órgano, celesta, clavicordio, percusión, armónica, batería. Charlie Haden: Bajo. Mike Millius: Voz (grito). Joey Waronker: Batería, percusión. Mike Boito: Órgano, trompeta. David Brown: Saxofón. Greg Leisz: Pedal steel.

Sobre el autor del artículo:

RICARDO PORTMAN: Fundador y editor de Ecos del Vinilo, es periodista y crítico musical, criado y alimentado por el rock n’ roll; creció a la vera de The Beatles, los Stones, The Doors, Pink Floyd y Queen, compañeros de viaje que fueron nutriendo el banco de datos de una mente que siempre se ha movido en acordes, estrofas y vinilos. – @ricardoportman_ | @ecosdelvinilo