La Celebración de Led Zeppelin

Celebration Day, el lanzamiento que engrandece su leyenda




Diciembre de 2007. Londres. En el escenario surgen las quijotescas figuras, que tras décadas de escapismo, decidieron al final congraciarse con su gigantesco legado. Led Zeppelin, para muchos la mejor banda de todos los tiempos, plantó su bandera de conquista en el recinto O2. Para grabar a fuego en la memoria este momento trascendental se editó Celebration Day, imprescindible para cualquier melómano, tanto en CD como DVD.
Robert Plant, Jimmy Page, John Paul Jones y Jason Bonham (hijo de Bonzo). Nada más y nada menos. Cual cirujanos, diseccionaron lo mejor de su carrera con 16 himnos. Abren con la primera canción de su elepé primigenio de 1969, Good Times Bad Times. ¿Acaso habría mejor tema de entrada?
Jimmy Page, padre del invento, finalmente se sacudió las telarañas de los dedos, para dar toda una demostración de poderío a las seis cuerdas. Sus raíces blueseras salen a relucir con maestría en Nobody Fault but Mine y Since I’ve Been Loving You.

La burbuja de concentración de John Paul Jones se mantiene intacta. Sus pulsaciones al bajo han ganado en contundencia, gracias a sus recientes incursiones en géneros más pétreos (Them Crooked Vultures). Jason Bonham,  haciendo honor a su apellido, se pone a la altura de sus mayores en la sala de calderas de la percusión.
Toda esta maquinaria sirve como base para la nueva versión de Robert Plant. Maduro, contenido y alma de crooner, impregna cada interpretación con un sentimiento más propio del blues que de ese rock visceral, trademark de los Zep.
No faltaron los pesos pesados de su repertorio. Kashmir, Stairway To Heaven, Black Dog, Trampled Under Foot, Misty Mountain Hop. El encore final con unos gloriosos Whole Lotta Love y Rock and Roll, de miedo. Una muestra irrefutable de que quien tuvo, retuvo.

Celebration Dayes un obsequio sensorial. Una conjunción de viejos guerreros que por un día le sacaron filo a sus armas preferidas, abriendo de paso el tarro de las esencias, que una vez los hicieron dioses del rock. La sardónica sonrisa de Plant lo deja muy claro: El diablo más sabe por viejo que por diablo. 



Copyright © 2012 Ecos del Vinilo.
Todos los derechos reservados. Prohibida la reproducción total o parcial sin previa autorización del autor.