Entrevista | Monkey Bell: “Sin esa química que tenemos, nada habría sido posible”

Entrevista | Monkey Bell: “Sin esa química que tenemos, nada habría sido posible”

La banda madrileña nos habla en profundidad sobre su disco Teoría M, orígenes e influencias

[Ricardo Portman] @ecosdelvinilo | @ricardoportman_

El pasado mes de febrero descubrí en la sala Siroco de Madrid a una banda que presentaba su primer disco y sobre todo reclamaba su lugar en una escena musical necesitada de fuerza animal. El grupo era Monkey Bell y el disco Teoría M, una producción independiente pero que bajo ningún concepto puede verse como “indie” (así lo describí en la review del EP) y que ahora sus propios autores Enrique Rodríguez (compositor, guitarra y voz), Alejandra Lapeña (voz y teclado), Marco Alcalde (bajo) y Marco Roque (batería y coros) me presentan de una forma directa, en una charla amplia, poniendo cada cosa en su lugar y dejando claro que las puertas de la percepción (a lo Huxley) hacia nuevas canciones están abiertas de par en par. Les invito a unirse a esta conversación con tintes de genuino alt-rock.

Foto: Luis Arteaga

Ricardo Portman: ¿Cómo está hoy humana y musicalmente Monkey Bell?

Monkey Bell: Nos encontramos en un momento dulce, tanto a nivel humano como a nivel creativo. Desde la salida del EP tuvimos claro que el camino a seguir pasaba por la creación de nuevos temas, que es lo que mantiene viva la llama por nuestra pasión, hacer música. En estos momentos estamos trabajando en nuevas canciones y grabando otras ya consolidadas que iremos publicando en los próximos meses.

RP: ¿Qué y quiénes sois Monkey Bell? 

MB: Somos un grupo de amigos que hace algo parecido al rock, con la mayoría de temas en inglés. La banda está formada por Enrique Rodríguez (compositor, guitarra y voz), Alejandra Lapeña (voz y teclado), Marco Alcalde (bajo) y Marco Roque (batería y coros).

RP: ¿Cómo se formó el grupo?

Marco Roque: La verdad que es una historia curiosa y muy casual que merece ser contada. Intento resumir… Allá por 2018, yo tocaba con unos amigos en un grupo de covers con la intención de pasarlo bien e incluso hacer algún bolo esporádico. Cuando estábamos cogiendo ritmo de ensayos, me escribió Quique (de aquellas un amigo del trabajo), llevábamos años sin vernos y me preguntó si nos veíamos y de paso nos tocábamos unos temas. Enseguida se unió a los ensayos y pasó a formar parte del proyecto.

Quique siempre tenía la inquietud de probar a tocar temas propios que tenía “en el cajón”, sin ver la luz. Cuando trajo al local sus primeras ideas musicales, nos parecieron magníficas al resto del grupo y decidimos dar el paso, dejar atrás las versiones y ponernos manos a la obra con la composición de nuestros temas. 

Estábamos empezando a dar forma a los temas cuando, por mera divergencia de caminos, nos vimos sin cantante. Gracias a una bonita casualidad, conocí a Alejandra en la mítica jam madrileña de los jueves en Thundercat.

Ella cantaba por placer en sus ratos libres y estaba buscando una banda para dar un paso más, se vino un día al local y si a mí ya me cautivó aquella noche, al resto del grupo le costó un ensayo.

A partir de ahí es cuando la tormenta musical descargó sobre nuestras cabezas y empezamos a componer tema tras tema. Poco antes de comenzar a grabar nuestro primer EP, de nuevo por cuestiones de la vida, nos quedamos sin bajista y después de algunas pruebas, se nos echó el tiempo encima y tuvimos que buscar ya con urgencia, al menos para la grabación. Llamé a mi colega Marco Alcalde, un gran músico con mucha experiencia al bajo y en los escenarios…En definitiva, un crack que al terminar de grabar el EP se quedó con nosotros y hasta hoy…esto es Monkey Bell.

RP: Quienes os han visto en concierto pueden intuir vuestras influencias. ¿Cuáles son vuestros referentes musicales?

MB: Bebemos de muchas fuentes, teniendo en cuenta que cada uno tiene unos gustos musicales muy distintos y quizás eso haya hecho que sonemos como sonamos. Eso sí, tenemos un amor común por el rock de los 80´s y 90´s y su sonido, que es probablemente lo que más se puede “respirar” en nuestros temas. The Smiths, Pixies, Red Hot Chili Peppers e incluso bandas más actuales con un toque más punk y femenino como Belako, podrían definir a grosso modo nuestra inspiración, aunque podríamos enumerar una retahíla infinita de bandas influyentes y referentes.

RP: Tras mucho trabajo inicial en el local de ensayo durante varios años ¿Cuáles fueron las señales que os indicaron que era el momento de salir a los escenarios y entrar al estudio?

MB: Muchos de nuestros amigos y familiares nos apoyaban y motivaban ensayo tras ensayo durante los 3 años que estuvimos “encerrados” en el local, haciéndonos conscientes de la gran evolución que estábamos teniendo. En parte gracias a ellos y cuando nosotros mismos nos dimos cuenta de que la curva de aprendizaje se estaba relajando, vimos que era el momento de compartir nuestra música con el mundo, o más bien con la noche madrileña. Fue entonces, en septiembre de 2022, cuando dimos el salto al directo y planificamos una pequeña gira por salas de la capital como Thundercat, Honky Tonk, Barco o Siroco, entre otras, en las que sentimos una gran acogida del público llegando en varias ocasiones a llenarlas.

En paralelo, uno de nuestros objetivos principales desde que, casi sin darnos cuenta, acumulamos 12-14 temas propios terminados, fue grabar un disco y publicarlo en formato físico y digital. No sabíamos si sería un LP, un EP, o simplemente un par de sencillos, pues dependíamos del presupuesto, ya que iba a ser financiado por nosotros mismos. Por aquellas fechas en las que andábamos buscando estudio, Ale fue a una firma de discos de Maika Makovski y tuvo la ocasión de charlar con ella, que le recomendó a su ingeniero de sonido, Isaac Rico, quien a su vez graba y produce en Metropol Studios… y allá fuimos. 

RP: Teoría M es vuestro EP debut. ¿Su grabación fue una combustión instantánea de primeras tomas o un trabajo más prolongado con decenas de tomas meditadas? 

MB: Por cuestiones de presupuesto seleccionamos 6 temas y trazamos un método de grabación mixto en el que algunas partes las grabamos en estudio (Metropol) y otras desde casa o en nuestro local de ensayo (Pandora´s Vox, nuestra casa).

Se podría decir que, para la complejidad del asunto de grabar algunas partes con nuestros propios medios, se dio muy bien. La grabación de baterías fue bastante rápida en el estudio; bajo, guitarra y teclados los grabamos nosotros mismos haciendo “equipo técnico amateur” en el local y la voz, tras varios intentos frustrados de grabarla en casa, se terminó recurriendo de nuevo al estudio, donde ya salió en muy pocas tomas.

RP: ¿Cuándo entraron a grabar tenían en la cabeza uno o varios discos como modelos a seguir para el mood y la producción de Teoría M?

MB: Siempre rondaban por nuestras mentes los referentes de cada uno, un disco u otro, pero al final, en el momento que comenzamos a grabar, nos metimos tanto en nuestra película, que esas influencias desaparecieron para darle la bienvenida al sonido Monkey Bell, o el reflejo de lo que nosotros somos.

RP: ¿Qué sintieron la primera vez que escucharon el disco completo, terminado?

MB: Fue unasatisfacción enorme, sin haber sido padres/madres ninguno de nosotros, metafóricamente podríamos decir que fue como ver por primera vez la cara al bebé que habíamos estado gestando durante tantos meses, fruto de mucho trabajo y sacrificio a todos los niveles. Dedicamos también mucho cariño al formato físico, donde además de ser muy meticulosos con los detalles, la maquetación e incluso las texturas (funda de cartón mate, cd con acabado disco de vinilo…), la artista Marta Lapeña hizo el diseño de la portada y Luis Arteaga las fotografías, dos grandes.

Por contra, enseguida empezamos a ver los defectos y todo lo que, después de que pasara tanto tiempo desde que grabamos hasta que publicamos y haber seguido creciendo y mejorando, podríamos haber hecho mejor, pero suponemos que ese es el proceso natural de los músicos. 

Algo que sí sentimos, desde el día que publicamos Teoría M, fueron las ganas de ponernos a trabajar de inmediato en los siguientes trabajos, que esperamos poder sacar pronto a la luz.

RP: ¿Qué aprendizaje os dejó la grabación para vuestras próximas producciones?

MB: Sobre todo, la importancia de la disciplina, la constancia y pase lo que pase, la unión como banda. Al fin y al cabo, somos 4 amigos que estamos metidos en esta aventura por amor a la música. El mayor aprendizaje que sacamos, creemos, es que sin esa química que tenemos, nada de esto habría sido posible.

RP: ¿Qué nos pueden contar de cada uno de los seis temas del EP?

Quique Rodríguez: Pavlov: Este tema habla sobre el deseo en estado puro, que puede más que cualquier freno de nuestra conciencia… ¡Los perros de Pavlov salivando ante el trofeo!

Alright: Quizás, la canción “decana” de Monkey Bell. De hecho, para nosotros es un continuo recuerdo de cómo se inició el grupo como tal. Alejandra cantándola en su “casting” y el resto viendo cómo se estaba creando de repente un sonido, algo completo. Su letra habla sobre la soledad que conlleva tener que tomar ciertas decisiones que sabes que debes tomar, aunque no quieras. Alright supone una catarsis, un punto de inflexión; nuestro Help! de los Beatles particular.

Purple Man: Trata de entrar en la mente de un abusador. Pone el foco en cómo esta puede autojustificar todo tipo de actos. La letra, en parte, toma como referencia El Corazón en las Tinieblas, de Joseph Conrad… de cómo todo acto atroz cuenta siempre con la autoindulgencia y justificación por parte de quien lo comete. 

Fallen Angels: Sentimos que Fallen tendría una fuerza extra si el peso lo llevaba el bajo, impulsado por un ritmo constante de batería. Un tema un tanto oscuro, un guiño a Joy Division. El origen de esta letra es curioso…de hecho, surgió por mera casualidad. La empecé a escribir el día que falleció Maradona, quien en cierto modo puede evocar a un ángel caído. Me gusta que las letras sean un tanto crípticas, que cada uno pueda retorcerlas y adaptarlas a sus vivencias o impresiones. Este tema,se adentra en el ejercicio de imaginar qué debe pasar por la cabeza de quien lo tiene todo y, aun así, solo quiere asomarse a su lado más autodestructivo.

Rokin: El título es el nombre de una calle de Ámsterdam. Va de cómo un viaje físico puede devenir en una experiencia sensorial integral. Un grito primario, pero desde una terapia alternativa…. La letra más psicotrópica de Monkey Bell.

Jartum: La canción intenta reflejar una imagen, más que guiarse por el sentido literal de su título: Jartum, capital de Sudán, país desértico en su mayor parte, en continuo conflicto. Casi de forma onírica, se trata de proyectar un panorama de desolación. El significado se alinea con el de Pavlov, pero a la inversa. Dos caminos destinados a cruzarse que al final nunca podrán converger. Ritmo continuo y contundente para dar un aire marcial a la aceptación del destino.

RP: Desde hace varios años se ha abusado -de forma errónea- del término ‘indie’. ¿Os sentís ‘indies’ en el sentido de estilo que se le da actualmente? 

MB: La pregunta es, ¿qué sentido se le da actualmente al término? Ese sería un tema que da para otra entrevista entera…(risas).

Si algo tuviéramos nosotros de indie, sería en el sentido original del término, que hace referencia a la música independiente que surgió en Inglaterra en los años 80, fuera de todo marco normativo y comercial de la época. Nos cuesta mucho y nos gusta muy poco etiquetarnos, pero si tuviéramos que definir un poco nuestro estilo, podríamos decir que nos consideramos un grupo de Rock Alternativo en el sentido más amplio del género, y a partir de ahí, que cada oyente juzgue por sí mismo, ¡para qué encasillarse!

RP: La pregunta de preguntas: ¿El rock está muerto?

MR: ¡Monkey Bell está aquí para decir lo contrario! Personalmente, agradezco haber podido vivir mi niñez y adolescencia en los 80-90, para mí, los mejores años de la música internacional.

Marco Alcalde: Aparte de en Monkey Bell, estoy en dos grupos de versiones y, basta ver cómo están de llenos los locales de ensayo para darse cuenta de que el Rock está más vivo que nunca. Mientras haya gente de todas las edades cargada con sus instrumentos y con la pasión de tocar o hacer música, el rock nunca morirá.

RP: ¿Cuáles serán los siguientes pasos de Monkey Bell?

MB: Ahora mismo, después de toda la locura que supuso la grabación y publicación del EP y la cantidad de conciertos que hemos dado en el último año, estamos en un periodo de calma, composición y trabajo. Por un lado, estamos dando forma a nuevos temas que estrenaremos pronto en directo y por otro, grabando maquetas de los siguientes temas que queremos publicar próximamente.

Eso sí, todo el mundo apuntando en el calendario nuestro próximo concierto el 19 de enero en la sala La Caverna, en pleno corazón de Huertas (Madrid). Llegaremos con muchas ganas después de varios meses sin tocar en directo, así que ¡vamos a ir a fuego!

RP: Para cerrar: ¿A qué músico, de cualquier época, regresaríais de ultratumba?

Alejandra Lapeña: Sin ninguna duda, a Jim Morrison.

QR: Buff… muy difícil… me hubiera encantado escuchar lo que nunca llegó a componer Jimi Hendrix… ¿cómo habría sonado? 

MR: Yo resucitaría a Steve Lee, cantante de Gotthard, una de las mejores bandas de Hard Rock de la historia.

MA: Resucitaría a Chuck Berry, para mí, el único y verdadero Rey del Rock. |

Foto: Luis Arteaga

Sobre el autor de la entrevista:

RICARDO PORTMAN: Fundador y editor de Ecos del Vinilo, es periodista y crítico musical, criado y alimentado por el rock n’ roll; creció a la vera de The Beatles, los Stones, The Doors, Pink Floyd y Queen, compañeros de viaje que fueron nutriendo el banco de datos de una mente que siempre se ha movido en acordes, estrofas y vinilos. – @ricardoportman_ | @ecosdelvinilo

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