Crítica | Muse: Magia (en pequeñas dosis)

[Ricardo Portman] @ecosdelvinilo | @portman918

Fact: Vivimos en una época donde los discos ya no sorprenden. Fact: Es evidente que ningún álbum genera discusión o polémica razonada. Fact: Muse sigue buscando el esquivo mojo creativo de antaño. Fact: Aún desde la irregularidad el power trío británico es mejor que el 99% de las bandas ‘actuales’.

Will Of The People no nos va a hacer cambiar de opinión con respecto a Muse. Quienes les aman lo seguirán haciendo desde la subjetividad; quienes les odian lo seguirán haciendo (también desde la subjetividad). Es lo que tienen los grupos llamados al Olimpo de los grandes: Generan emociones no cuantificables. Es bastante difícil opinar sobre Muse desde la más absoluta objetividad. Dicho esto quiero dejar por escrito que su nuevo álbum es mejor que lo que se dice de él. No es el desastre que leo en otras reviews. Para nada. Claro, si estamos esperando un Absolution pues no, ésa no es la actitud.

Estos treinta y siete minutos de música nos confirman el por qué de la elección de los primeros tres singles, que revisan de alguna forma los registros de sus obras anteriores: Won’t Stand Down retoma la senda rock, Compliance nos recuerda el experimento del Simulation Theory y Will Of The People nos trae a la memoria -con músculo eléctrico- a ese personaje llamado Brian Warner AKA Marilyn Manson. Los directos elevaron los enteros para que la imponente Kill Or Be Killed fuera el cuarto sencillo (con videoclip de concierto incluido) y hasta aquí lo meritorio de lo mediáticamente expuesto de forma anticipada, pero hay más en el disco. Liberation es una balada épica Queen-mood que si no te emociona es que estás muerto por dentro. Ghosts (How Can I Move On) también apela al piano con Matt Bellamy pellizcando en la fibra más sensible del oyente.

Pero cuando pensamos que todo va bien es cuando regresan las pifias, una irregularidad difícilmente justificable viniendo de estos tres músicos portentosos: You Make Me Feel Like It’s Halloween no te la puedes tomar en serio como una canción de Muse; Verona contiene tanta azúcar que corres el riesgo de un colapso interno y Euphoria suena ideal para saltar en un concierto pero por alguna razón imagino este tema cantado en una gala de Eurovisión y eso me termina echando para atrás. Afortunadamente Bellamy, Wolstenholme y Howard llegan al rescate con la mejor canción del álbum: We Are Fucking Fucked. Aquí tenemos el nuevo himno de Muse, cargado con la rabia distorsionada y la claridad de concepto que espero de ellos: Aquí estaba el camino ¿por qué no lo siguieron?

Will Of The People podrá no ser -evidentemente- mi disco favorito de Muse y no lo será para la mayoría de los escuchas, pero quien tuvo, retuvo. Dejemos que juzgarles por su brillante pasado y escuchemos con generosidad lo nuevo, que ahí también queda magia (aunque sea en pequeñas dosis).

Sobre el autor del artículo:

RICARDO PORTMÁN: Fundador y editor de Ecos del Vinilo, es periodista y crítico musical, criado y alimentado por el rock n’ roll; creció a la vera de The Beatles, los Stones, The Doors, Pink Floyd y Queen, compañeros de viaje que fueron nutriendo el banco de datos de una mente que siempre se ha movido en acordes, estrofas y vinilos. – @portman918 | @ecosdelvinilo