Entrevista | Salvatge Cor: “Las canciones brotan si sales a por ellas”

Conversamos sobre su nuevo disco Cruïlla

[Teresa Cerón López] @ecosdelvinilo | @terethali

Salvatge Cor es LLorenç Romera Pericàs, Marina Bril y Cristian Eichborn, vienen de Mallorca y con ellos llega su nuevo disco Cruïlla. La alineación de Salvatge Cor ha variado con el tiempo, con LLorenç como punto focal desde el inicio. Referencias como Hi Ha Gent Que Entra Dins La Teva ÀNIMA i Ja No En Sortirà Mai Més (2018) y Bruixes (2018) les han llevado al lugar musical que hoy ocupan y las expectativas son altas. Hablamos con LLorenç sobre música, influencias y lo que hay detrás de su propuesta.

Teresa Cerón: Dejaste el listón muy alto con Bruixes, tu anterior trabajo discográfico, pero en Cruilla vuelves a superarte. ¿Tienes esa sensación también?

LLorenç Romera: Muchísimas gracias. Tanto en Bruixes como en Cruïlla mi intención era plasmar una etapa vital, y en ese sentido, estoy contento. No sé si soy la persona más adecuada para decir que me he superado, tampoco tengo la perspectiva suficiente en el tiempo para hacer tal análisis.

TC: Al escucharlo mi primera impresión fue la de que estabas homenajeando a todos tus ídolos musicales, es un disco cargado de referencias. ¿Verdad?

LR: Sí. En realidad CRUÏLLA es un scrapbook lleno de referencias en su ADN, muy acorde con artistas que beben del folk hoy en día, y me gustaría citar a Rodrigo Cuevas, Maria Arnal i Marcel Bagés, Marala, Dellafuente, El Niño de Elche, Rosalía, C Tangana… El disco busca una raíz antigua, anterior a mi generación… a menudo tengo la sensación que hemos quedado un poco en tierra de nadie. Ni del todo analógicos ni del todo digitales. Ahí hay otro cruce de caminos y el uso de referencias lo quiero interpretar como la necesidad de encontrar anclajes desde donde proyectarse, eso sí, con un minimalismo que nos vino dado a base de trabajar y ver que menos era más, y así llegar a un mensaje lo más sencillo y directo posible. Formamos de un flujo continuo y pretender una originalidad sin contexto carece de sentido. Somos nuestra propia esencia, naturalmente, y también el entorno que nos rodea en la medida que nos dejamos permear.

TC: Entiendo Cruilla como un ejercicio de voces que se cruzan en mitad de un espacio en el que impera el minimalismo. Me refiero a canciones como Magaluf Summertime… la pell de la pell y la bellísima ¿Era ese tu propósito?

LR: Exactamente. Es un ejercicio de voces humanas, sin importar ningún tipo de condición. El minimalismo no es algo buscado per se, es que situando la voz como eje central, Cristian Eichborn y yo nos dimos cuenta que la debía ser la absoluta protagonista, al servicio de una historia que va más allá de mí, que en realidad soy un collage de vivencias y aún me estoy conociendo. Las diferentes colaboraciones en el disco participan de una suerte de coro griego, y hay nombres que por motivos diversos no han estado en CRUÏLLA. Al final ha sido un elepé más bien breve, con mucho material descartado, que dura media hora exacta y en principio es la primera mitad de un todo más grande, que todavía queda por completar, eso si no cambiamos de rumbo.

TC: ¿Sampleas a Antonia Font, Gata Cattana y Marina Rosell? Enhorabuena por engrunes, me ha emocionado mucho.

LR: Sí, eran nombres que estaban ahí desde que empecé a gestar el disco a principios del confinamiento, en las primeras maquetas. “engrunes” me hace especial ilusión porque en ella recita Biel Mesquida, alguien a quien admiro desde que leí L’adolescent de sal y que se prestó a participar con toda la generosidad del mundo. Que él esté en CRUÏLLA no es nada gratuíto y es la colaboración más indispensable, la piedra angular de todo, una mirada al ayer, el hoy, y también el mañana.

TC: ¿Crees que la producción de Cristian Eichborn ha sido crucial para que el disco sonara así? ¿Cómo ha sido el mano a mano?

LR: Cristian Eichborn firma un 50% del disco y es un acuerdo al que llegamos de manera natural y casi sin planteamiento: sin él, CRUÏLLA no hubiera existido, las canciones no serían lo mismo ni de lejos. Para mí, es el complemento ideal y, sobre todo, es uno de mis mejores amigos. El mano a mano ha sido muy fácil, hemos explorado un montón y nos hemos reído mucho produciendo juntos. Queremos seguir igual.

TC: Com estimar un mirall fue el primer single, la canción que hizo de avanzadilla de todo lo que vendría después ¿Qué podrías contarme de su proceso creativo?

LR: “Com estimar un mirall” salió del tirón cuando nos desconfinaban. Tenía el instrumental y grabé la letra de manera improvisada, no la tenía escrita. Luego la copié y pegué doblando la voz usando el efecto Prismizer y casi estaba ahí. Con tres capas de sintes y un bombo al final de la canción ya la tenía. No me suele ocurrir y cuando pasa con tanta fluidez, lo único que puedes hacer es dejarte llevar. Es genial cuando la canción te conduce a ti y no lo contrario.

TC: Eres nuestro Sufjan Stevens aunque estarás cansado de esa comparación ¿no?

LR: No me lo habían dicho nunca en una entrevista. Gracias. Es un artista que me gusta mucho y que antes escuchaba un montón.

TC: ¿Cómo definirías ‘de mi ‘? Atesora fragmentos de Antonia Font.

LR: La idea detrás de “de mi:” era traer aquel Antònia Font de principios de los dosmiles a 2022. La planteamos como una canción que pudiera ser parte de la banda sonora de la serie Euphoria, una canción para mi sobrina de 17 años, que es muy fan de Ghostmane, Lil Peep y Zendaya. Tiene un poco que ver con el hecho de que Bruixes se llevara unos cuantos premios y el tema me agobiara un poco, porque me encanta estar por casa a mi rollo, con mis historias, y exponer al Llorenç cotidiano lo mínimo posible. Se supone que tenía que estar exultante, ¿no? Pues para nada, me sentía muy impostor, los premios están genial pero el día a día es lo que realmente cuenta. “Ses coses no són fàcils per ningú”…

TC: ¿Las canciones brotan cuando menos te lo esperas? ¿Es caprichosa la inspiración?

LR: Las canciones brotan si sales a por ellas, y la inspiración tal vez sea un chispazo, pero es un chispazo precedido de un trabajo previo. Con el tiempo, me he acostumbrado a ver esta profesión como un oficio. Hay que acercarse de manera artesanal y, naturalmente, si estás allí, las ideas terminan cobrando forma. Cuando entiendes que estás al servicio de una canción y todo lo que ésta implica, el ego dice adiós y tú solo eres… digamos que una antena. No somos el centro del universo. A mí no ya no me apetece serlo, aunque mi posición en Salvatge Cor es lo que tiene. Sueño con un día limitarme a producir a otra gente y ayudarla solo por el disfrute de crear.

TC: Los samples y el autotune son un añadido a tu sonido, déjame confesarte que me ha parecido más potente y sólido que nunca. ¿Te han dicho que el juego que realizas con la nueva instrumentación logra que el oyente sienta que podría palparla?

LR: Sí, y me alegra que la gente lo reciba así. Con CRUÏLLA quería abordar una poética del cuerpo particular y las texturas son fundamentales. Hay un no-sé-qué muy plástico en la música que me llama la atención desde siempre, y por ejemplo en Frank Ocean hay una creación de escenas y narrativas alucinante. Buscábamos eso, a nuestra manera, con nuestros medios, con nuestra manera de ser. Para mí es un hilo de Ariadna del que seguir estirando.

TC: El primer corte se titula d’atzar. Es desnudo y delicado; tu voz es la gran protagonista ¿Es una de las letras más personales de este proyecto?

LR: Es muy posible. Es una canción dedicada a la autoestima, al amor propio, al aceptarte de una vez tal como eres, al mirarte en el espejo y ser consciente, sin drama, que venimos aquí por poco tiempo y más nos vale cuidarnos y protegernos. También es un homenaje a Debussy, que creaba ese ambiente, esa atmósfera tan concreta. Para mí es una de las dos canciones claves para entender el disco. Mi idea, algo vaga, era entrar en el mood de las maquetas que publicó Alejandro Sanz de “Cuando nadie me ve” y “El alma al aire”.

TC: ¿Orfeu.Xyz es una ventanita a tu alma? Es otro temazo.

LR: Gracias de nuevo.“orfeu.xyz” cierra el círculo que abre “d’atzar”. Es la otra canción clave de CRUÏLLA, una piedra de rosetta, el manual de instrucciones para entender mejor el disco. No me gustan las narrativas hegemónicas, hay tantos puntos de vista y lecturas posibles… hay una mención a “Cap a la llum”, porque la letra es un poema de Joan Vinyoli, y la coda es Biel Mesquida cantando “Vou, veri, vou”, una canción de cuna tradicional de Mallorca, que podría estar cantándole al niño del videoclip (mi yo de 11 años) o ser el mismo niño años más tarde.

TC: ¿Por dónde vas a girar para que podamos ir a verte?

LR: El 25 de junio estaremos en Menorca, en el Grahame Pearce Fest. El 30 de junio vamos al Vida Festival, en Vilanova i la Geltrú. Y ya en julio, tenemos dos bolos en Mallorca, día 1 en Santanyí y a finales de mes en un festi de referencia en la isla, el MoboFest. Hay alguna fecha más que todavía no está confirmada. |

Sobre la autora de la entrevista:

TERESA CERÓN LÓPEZ: Arqueóloga y melómana. Es la pluma fina y el verbo exacto, con Lezón y Rosenvinge en el corazón. Es parte fundamental de Ecos del Vinilo desde el big-bang. – @terethali