Muere el integrante de Foo Fighters a los 50 años
[Ricardo Portmán] @ecosdelvinilo | @portman918
Si me preguntaban por el máximo símbolo de la batería rock contemporánea el primer nombre que se me venía a la cabeza era el de Taylor Hawkins de Foo Fighters. Podías ser más o menos fan de la banda de Dave Grohl pero a lo que era imposible resistirse era al carisma, la pericia musical y el aura de rockstar de Taylor. Hoy, el rubio maravilloso del rock n’ roll murió a los 50 años en Bogotá, pocas horas antes de tocar en el festival Estéreo Picnic. Se encontró su cuerpo en su habitación del hotel Casa Medina, de la cadena Four Seasons, donde se hospedaba el grupo.
La banda lo anunció en su cuenta oficial de Twitter y el planeta-música se revolvió a todos los niveles: “La familia Foo Fighters está devastada por la trágica y eterna pérdida de nuestro querido Taylor. Su espíritu musical y su risa contagiosa vivirán con todos nosotros para siempre”.
Las causas de su fallecimiento no se han difundido pero ya las autoridades colombianas adelantaron que “la causa de la muerte se encuentra por establecer, de acuerdo a versiones de allegados el deceso podría estar asociado al consumo de sustancias estupefacientes”.
No puedo ni imaginar el dolor intenso, hasta niveles que las palabras no pueden expresar, que embargará a los Foo Fighters, una banda que más que compañeros musicales eran prácticamente familia, en especial Dave Grohl, quien consideraba a Taylor su hermano musical. El público ya esperaba en el festival bogotano y por las pantallas tuvieron que enterarse que por “una situación médica de mucha gravedad” no saldrían a escena los estadounidenses. Posteriormente, cuando tocaban los Black Pumas fue cuando se difundió la trágica noticia. Con el público en completo silencio se homenajeó a Hawkins con un My Hero sonando por todo el recinto, justo cinco minutos antes de la medianoche.
El mundo de la música está unido como pocas veces en el dolor por la pérdida de una de sus figuras. A Taylor le quería y respetaba el rock-system de una forma unánime. Las muestras de tristeza no se hicieron esperar. Tom Morello: “Dios te bendiga. Me encantó tu espíritu y tu rock imparable y poderoso. Descansa en paz, amigo”. Ozzy Osbourne: “Mi corazón, mi amor y mi pésame para su esposa, sus hijos, su familia, su banda y sus fans. Te veo en el otro lado”. Ringo Starr: “Dios bendiga a Taylor. Paz y amor para toda su familia y su banda”.
¿Qué sigue? La verdad no creo que Foo Fighters puedan continuar como banda. Me sorprendería mucho que lograran subirse a un escenario sin Taylor. Foo Fighters sin tan inimaginables sin Hawkins como lo eran Led Zeppelin sin Bonham. El tiempo responderá esta interrogante.
Hoy es un día oscuro, triste y sin duda más vacío de ese nervio rock tan necesario para seguir adelante. Con Taylor Hawkins se marchó al infinito un gran músico, un alma gentil y sobre todo un ser que amaba la música por sobre todas las cosas. Todos, de alguna forma, queríamos ser amigos suyos y no pocos nos imaginábamos hablando con él sobre discos y sobre Roger Taylor, su ídolo y referente. Este sábado 26 de marzo de 2022 se oye en todo el globo el lamento de la batería.
Sobre el autor del artículo:
RICARDO PORTMÁN: Fundador y editor de Ecos del Vinilo, es periodista y crítico musical, criado y alimentado por el rock n’ roll; creció a la vera de The Beatles, los Stones, The Doors, Pink Floyd y Queen, compañeros de viaje que fueron nutriendo el banco de datos de una mente que siempre se ha movido en acordes, estrofas y vinilos. – @portman918 | @ecosdelvinilo
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