El cielo a la misma distancia que la tierra

«… desde las épocas Beatles, George Harrison tenía la facilidad de demostrar sentimientos con la voz que eran palpables a simple escucha…»


Por Jéssica Signoretta

Uno de los discos más populares de un beatle que no fue el más popular: Anteojos espejados de un hombre con una guitarra en sus brazos y pelo hasta el cuello, sobre una estética predominada por el color violeta sobresalían de la mesa llena de discos. La excusa era perfecta. El 23 de febrero George Harrison hubiese cumplido 70 años, y Cloud 9 estaba a mano. Harrison, aquel beatle que en 1969 logró que una canción compuesta por él sea la cara A de un simple, gracias a Something, una de las canciones beatle más versionadas a lo largo de la historia, sin mencionar el clásico Here comes the Sun.  Harrison, quien no tuvo lugar quizás, en la era beatle, a llevar a cabo las composiciones que sí plasmó en su carrera solista, y que Cloud 9 lo emblema.

Once canciones lo componen junto con dos tracks adicionales. Su máxima popularidad como solista también se encuentra en este disco. Got my mind set on you es la canción que cualquier persona que no haya escuchado a fondo a George, sabe que le pertenece. Un disco que por momentos parece algo lineal, pero que al escucharlo con atención lleva a pensar “si los Beatles hubieran aprovechado más las ideas de Harrison, hubiesen tenido más obras maestras”.

Aquella voz intacta, como si I miss you estuviera sonando comienza a cantar el disco bajo Cloud 9, primera canción que alude al nombre. La armonía es mutante, y las guitarras acompañan a un par de saxos que van al frente. That’s what it takes continúa, con una melodía constante en toda la canción pero llevadera, que invita a escucharla con los ojos cerrados y que arreglos de órganos le dan la vuelta final. El ánimo puede levantarse con Fish on the sand, con tonos un poco más agudos de George y letra casi continua que mantiene la importa de George: las guitarras tienen que tener el mismo protagonismo que la voz. Un piano y George en un tono más grave dan comienzo a Just for today, la primer balada de Cloud 9. Nada más. Por el medio, se asoman unos coros, unos riff sentimentales y unos golpes tranquilos de batería como para terminar de detallarla. Sí. Aquella canción que hoy seguimos escuchando en las Radios que nos hace subir el volumen cuando suena pertenece a este disco. This is love. Muchas veces, desde las épocas Beatles, George Harrison tenía la facilidad de demostrar sentimientos con la voz que eran palpables a simple escucha como puede notarse en esta canción, que más allá de su letra, puede plasmar una sensación alegre. El ritmo dinámico lo mantiene When we was fab. Por supuesto, un tributo a su gran pasado, donde lo acompaña Ringo Starr en la batería, y a los 60, la década que vio nacerlo todo.  Devil’s radio tiene una de las composiciones más atractivas de Cloud 9, aquella canción que una vez escuchado el disco, dan ganas de repetir. Harrison parece cantar entusiasmado, y un piano lo acompaña con la misma emoción que se mantiene en toda la canción. Guitarras acústicas son el personaje principal de Someplace else, una balada que invita a mover la cabeza. Un riff puede llegar a modificarle el ritmo, logrando algunas partes más lentas que otras. Sin embargo, Wreck of the Hasperus se lleva los premios. No solo por la variación musical que presenta su armonía, sino porque los instrumentos se lucen juntos al mismo tiempo y George muestra su cálida voz más que en las demás canciones. Influencias orientales pueden encontrarse en Breath away from heavenla última balada de Cloud 9 que por momentos puede sonar algo cansadora. El disco termina con aquel clásico mencionado Got my mind set on you, el típico caso del pedido “subí, subí el volumen”. Shanghai surprise y Zigzag son los tracks de la película Shanghai surprise.

Cloud 9 fue producido por el mismo George junto a Jeff Lynne y contó con invitados tales como Eric Clapton en guitarra eléctrica, Elton John y Gary White en piano y Ray Cooper en batería y percusión. Un disco de 1987 que marca la identidad propia de George Harrison y que se convierte en una obra cumbre por la calidad de sus canciones. Al mismo tiempo, que el disco predecesor de Cloud 9 fue Gone Troppo, en 1982, lo que llevó a cumplir su objetivo de retornar a la música con su sonido más contemporáneo para la época.

Debido a lo que representa Cloud 9 en el año 2004 obtuvo su remasterización y puede adquirirse en la actualidad. Definitivamente no se necesitan excusas para escucharlo, solo ganas de pasear sobre nueve nubes en el cielo con los ojos cerrados; o tal vez con diamantes como los de aquella Lucy beatle.


Jéssica Signoretta
Periodista especializada en música.
Colaboradora exclusiva de ecosdelvinilo.blogspot.com
Argentina
sintoniamericana.blogspot.com

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